Quiero que mi obra esté alejada de cualquier concepto, o al menos exenta de un concepto que pueda ser literalmente textualizado.
Creo que el Arte es otro medio de conocimiento, y por eso lo considero más coherente cuando no sea lingüístico.
Rechazo cualquier contenido que pueda ser encapsulado por palabras.
Todo lo que podemos ver en las galerías de arte son metáforas. Con diferentes fórmulas retóricas, pero en definitiva, todo es metáfora. Metáforas y símbolos.
Y yo quiero hacer algo apartándome de esto.
De vez en cuando, juego con algunas referencias culturales, pero siempre de forma burlona.
Me siento muy cerca del dadaísmo; Dadá no como movimiento, sino como mentalidad, como forma de entender las cosas.
Me encanta la Trash Culture y también las Artes Decorativas: en ambos casos por la falta de pretensiones. "Sublime" es para mí una palabra arcáica.
Siempre he intentado pintar de la misma manera que dibujo, por la inmediatez y frescura del dibujo. Más que virtuosismo, busco a hacer algo tonto y ridículo.
Al final, mi búsqueda personal es crear un arte lleno de honestidad, sencillez y gracia.